“Así es nuestra vida ahora: Cuidamos los unos de los otros, me ayudan muchísimo,” dice la artista a PEOPLE sobre sus hijos.

Céline Dion reunió las fuerzas para luchar contra sus problemas de salud gracias a sus hijos, que siguen siendo una parte crucial de su sistema de apoyo.

La artista es la más joven de 14 hermanos y, cuando era pequeña, sus padres sabían apartarlos de cualquier posible dolor, pese a las dificultades que la familia tenía para llegar a fin de mes.

“Mis padres eran extraordinarios. Tuvimos mucha suerte… Me dieron muchísimo apoyo y amor. Hubo momentos muy, muy, muy duros en los que mi padre tenía que trabajar constantemente y mi madre sólo tenía amor para nosotros. Jamás nos faltó comida, amor, atención, afecto, nada. La fuerza que tengo me viene de ellos, sin duda. Me siguen dando mucha fuerza en mi vida.”

Aunque no tiene las preocupaciones económicas de sus padres, Céline protege a sus tres hijos, René-Charles (23) y los gemelos Eddy y Nelson (13) de la misma forma.

“Tuve que superar la pérdida de mi madre, de mi padre, de uno de mis hermanos y del padre de mis hijos - mi marido, mi manager - al mismo tiempo. No quería que mis hijos se asustasen.”

Antes de que le diagnosticaran el Síndrome de la Persona Rígida en agosto de 2022, Céline se sentía abrumada: “A ellos no les faltará un plato para comer hoy ni mañana, pero yo no podía estar sin saber qué me pasaba, ¿y si me muero? ¿Y si no vuelvo a despertar? Ya perdieron a su padre. ¿En qué estarán pensando? ¿Tendrán miedo de preguntarme? ¿Debería sacar yo el tema?”

Apoyada por el amor de sus hijos, la cantante priorizó su salud. Y tras recibir el diagnóstico, no sólo ella, sino toda la familia se sintió preparada para afrontarlo.

“Les dije que habían perdido a su padre, pero que la enfermedad de mamá era distinta. No me voy a morir. No es algo que se pueda curar, sino que tendré que aprender a vivir con ello,” dice recordando cómo se lo dijo a sus hijos.

Mientras se sometía a un intenso plan de tratamientos, Céline y su equipo médico también educaron a los hijos de la cantante en materia del Síndrome de la Persona Rígida. “Empezamos a hablarles de lo que me pasaba.”

Parte de sus síntomas incluyen episodios de crisis, en los que su cuerpo se vuelve rígido como una tabla, dándole un dolor insoportable. “Vieron una crisis - se lo explicamos, paso a paso. Cuando hago un ruido, o cuando no lo hago, y lo que pueden hacer sabiendo que tienen 13 años. Saben cómo ayudarme aunque no pueda comunicarme verbalmente con ellos porque no pueda producir sonidos.”

Cada dos ó tres meses, Céline y su terapeuta simulan una falsa crisis ante Eddy y Nelson, y “tienen botones de pánico en casa y saben cómo tranquilizarme”, dice la artista.

“La idea de contarles todo esto no era para asustarles. Lo que quería era que supieran: ‘Soy vuestra madre y es mi responsabilidad. Sois lo bastante mayores para saber que tal vez necesite vuestra ayuda. Son increíbles porque, todas las noches, me dan las buenas noches durante unos 15 minutos.”

“Me dicen que es porque he tardado un poco más de lo habitual en prepararme para ir a la cama. Sólo quieren asegurarse de que estoy bien. Así es nuestra vida ahora: Cuidamos los unos de los otros, me ayudan muchísimo.”

Cuando Céline hizo una aparición sorpresa en los Grammy a principios de este año para entregar el Premio al Álbum del Año a Taylor Swift, su hijo mayor la acompañó al escenario.

“No quería sentirme insegura, e iba a estar muy, muy nerviosa y feliz al mismo tiempo. ¿Qué podría pasar? Los aplausos… ¿me dará un shock ver al público? No quiero que pase nada malo,” Céline, que puede sufrir una crisis si su cerebro se sobre-estimula, recuerda sus preocupaciones previas a la ceremonia. “Mi hijo mayor me dijo ‘Voy contigo’. Disfruté cada segundo, y me sentí muy orgullosa porque mi hijo me preguntaba cada dos minutos antes de salir a escena… ‘Mamá, ¿estás bien?’

“Me dijo, ‘Caminaré contigo y después me echaré un poco atrás. Estaré detrás de ti. Cuando me necesites, simplemente mírame o mueve la mano. Me pondré a tu lado para que te apoyes en mí’, dice una Céline cada vez ´mas emocionada. “Tengo todo lo que necesito.”

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